Tras unos días dedicados a otros
menesteres ineludibles esta tarde he salido a rodar. Mi objetivo ascender al Bartolo
por su vertiente norte, sabedor de lo que me esperaba he iniciado ascenso a
ritmo suave por el Barranc de las Porqueretas dirección a Les Santes, con algún
tramo que flirtea con el 15%, unido al calor y la indeseable compañía de los
Tarines la verdad no los echaba de menos, he coronado e iniciado descenso al ermitorio
para poco antes de llegar sentir el sonido metálico de la rotura de un radio en
la rueda trasera, un alto en el camino y viendo que como aquel que dice no había
empezado he decidido dar media vuelta y volver sobre mis pasos con la rueda bailando.
En fin otro día será.
Tan cerca y tan lejos....
El radio en cuestión...
A deshacer el camino....
Salut!!!